En primer lugar debo reconocer, y reconozco, que alguna que otra vez Lolo Silva ha sido una excusa que he usado para marcarme unas risas. Lo reconozco, y lo hago porque, creo, que no era de forma "malvada". Leyendo su dimisión, y aunque obviamente no comparta sus ideas ni muchas de sus acciones, reconozco que siento la siento. Su gestión ha tenido aspectos oscuros (para mi lo de la estructura metálica de la Davis tampoco fue tan importante, sin entrar en matices, porque no creo que el fuera culpable....veo más fuerte lo de los viajes) pero sin ninguna duda también ha sido objeto de una campaña demasiado dura por parte de los sectores más conservadores.
La entrada del chico de 22 años de familia de trabajadores ferroviarios en el Ayuntamiento hispalense, el concejal más joven de la historia de este ayuntamiento, debía suponer una ruptura. Y en muchos aspectos la supuso. Creo que la juventud y las mujeres deberían estar mucho más presentes en los órganos de poder, y Lolo representaba a la juventud. Una juventud que rompe moldes juntando lo antes impensable. Comunista y cofrade (¿y por qué no?), comunista y "pijo" (¿y por qué no?)....
Lo de los casos del primo y la madre....como que yo no me los creo. No creo que él sea tan tonto como para no darse cuenta de que eso sería portada en los periódicos. No creo que ahí haya tanto tema como quieren hacer ver. Y si no que vayan a los tribunales como se fue con lo de la Davis.
En definitiva, que creo que Lolo Silva ha sido objeto de una feroz campaña de desprestigio que han agrandado sus errores y empequeñecido sus aciertos.
Espero que otra gente joven, desde su partido o desde otro, tome su relevo y se siga rompiendo moldes.
Laín Coubert
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