domingo, julio 22, 2012

Esas cosas raras llamadas libros (y CLXXII)

En esta ocasión he terminado de leer un libro que es considerado un verdadero clásico de la ciencia ficción. Era un libro del que había oído hablar en muchas ocasiones, y del que había leído críticas buenas y malas. Qué mejor que comprobarlo por ti mismo ¿no?.
Cita con Rama fue escrita en 1972 por Arthur C. Clarke, maestro de la ciencia ficción. Es tenida como uno de los mayores ejemplos de ciencia ficción dura, por el cuidado que puso el autor en que los datos expuestos en la novela fueran reales y mantuvieran un gran rigor científico y atendieran, así, a teorías asentadas.
Nos encontramos en un futuro próximo, donde el ser humano ha colonizado diferentes planetas del sistema solar. Eso le ha posibilitado una gran mejora técnica y científica, que, sin embargo, no ha conseguido eliminar peligros como el que destruyó gran parte de Europa al estrellarse un meteorito. 
A partir de ese desastre se crea un sistema de seguimiento de asteroides. Mediante dicho sistema localizan un cuerpo extraño, al que bautizan con el nombre del dios hindú Rama. Tras comprobar como los misterios asociados a ese cuerpo no hacen más que aumentar con el paso del tiempo, deciden mandar una misión para investigar. 
Lo que encuentran allí les responderá algunas preguntas, pero les abrirá muchos nuevos interrogantes.

Cita con Rama es, como decía anteriormente, uno de los mayores clásicos de la ciencia ficción. A partir de este libro, se abre una saga escritas en colaboración con otro autor. Sin embargo, no llegaron a impresionar tanto como lo hizo esta primera novela.

Está pulicado por Edhasa.

Laín Coubert

martes, julio 17, 2012

Esas cosas raras llamadas libros (y CLXXI)

Hace ahora una par de años que me leía un libro de Francisco Balbuena. Aquella historia estaba situada en Méjico. Por eso cuando ví este libro, una historia que se desarrolla en Sevilla, me decidí a leerlo. Siempre está bien leer historias en la que los personajes recorren calles conocidas. Y tras unos días de lectura intensa he llegado a terminarlo.
Nos encontramos en la Sevilla de Olavide y Jovellanos, en el año 1776. Una Sevilla acuciada por el choque de las ideas de reformas, cuyo centro neurálgico radica en el Alcázar, y las ideas ultraconservadoras defendidas por amplios sectores de la población y que tiene como epicentro el, aún en esa época, temido castillo de San Jorge. En ese entorno se suceden una serie de asesinatos. Una serie de personas relacionadas con el clero empiezan a aparecer decapitadas y con la sangre gelificada. 
Jovellanos, que ostenta el cargo de Alcalde del crimen, se pone a investigar, en colaboración con distintos personajes, entre los que sobresale un viajero inglés. Juntos correrán mil y una aventuras en las calles de una ciudad que ve ya con lejanía sus años de esplendor. En dicha investigación se verán involucrados nobles, masones, miembros de la Santa Inquisición, espías y un largo etcétera de personajes que pululan por las calles de la ciudad del Guadalquivir.

El Alcalde del crimen es un libro muy interesante, que nos cuenta una historia que nos sumerge en la Sevilla de esos años. La historia además no deja sin aliento en sus persecuciones e investigaciones. Eso sí, a veces da la sensación de que el autor lo ha alargado en demasía, creando demasiadas curvas en la historia. En todo caso, muy recomendable.

Está publicado por MR novela histórica.

Laín Coubert