viernes, octubre 06, 2006

Esas cosas raras llamada libros (y XI)


Este libro jamás hubiera pasado, creo, por mis manos (ni sus letras por mis ojos) de no ser por cierta astur-gaditana. Así que, por eso, y por cierta dosis de comodidad, usaré el propio comentario que ella hacía hace tiempo en Mundos de Papel. Ahí va:

El autor, con gran astucia, nos relata sus vivencias en África en la época de la descolonización y la independencia africana, quizás los años más duros de este continente. Numerosas aventuras vive en sus viajes por gran parte del continente más rico del mundo. Pero la riqueza de África no es una riqueza material. La riqueza de áfrica es biológica, cultural, espiritual, armoniosa. No os desvelaré más secretos. Si queréis descubrir el auténtico corazón de África, el continente discriminado y olvidado, leeros el libro. Nada más increíble que la realidad de un pueblo del que nunca nos enseñaron nada."Se vuelve cada vez más importante para el mundo la pregunta no de cómo alimentar a la humanidad – hay comida suficiente, a menudo sólo se trata de organización y transporte -, sino de qué hacer con la gente. Que hacer con la presencia en la Tierra de millones y millones de personas. Con su energía sin emplear. Con el potencial que llevan dentro y que nadie parece necesitar. ¿Qué lugar ocupa esa gente en la familia humana? ¿El de miembros de pleno derecho? ¿El de prójimos maltratados? ¿El de intrusos molestos?""El africano es un hombre que desde que nace hasta que muere permanece en el frente, luchando contra la – excepcionalmente malévola – naturaleza de su continente, y ya el mero hecho de que esté con vida y sepa conservarla constituye su mayor victoria."

El autor, con gran astucia, nos relata sus vivencias en África en la época de la descolonización y la independencia africana, quizás los años más duros de este continente. Numerosas aventuras vive en sus viajes por gran parte del continente más rico del mundo. Pero la riqueza de África no es una riqueza material. La riqueza de áfrica es biológica, cultural, espiritual, armoniosa. No os desvelaré más secretos. Si queréis descubrir el auténtico corazón de África, el continente discriminado y olvidado, leeros el libro. Nada más increíble que la realidad de un pueblo del que nunca nos enseñaron nada."Se vuelve cada vez más importante para el mundo la pregunta no de cómo alimentar a la humanidad – hay comida suficiente, a menudo sólo se trata de organización y transporte -, sino de qué hacer con la gente. Que hacer con la presencia en la Tierra de millones y millones de personas. Con su energía sin emplear. Con el potencial que llevan dentro y que nadie parece necesitar. ¿Qué lugar ocupa esa gente en la familia humana? ¿El de miembros de pleno derecho? ¿El de prójimos maltratados? ¿El de intrusos molestos?""El africano es un hombre que desde que nace hasta que muere permanece en el frente, luchando contra la – excepcionalmente malévola – naturaleza de su continente, y ya el mero hecho de que esté con vida y sepa conservarla constituye su mayor victoria."

Es un buen libro, que rompe ciertos esquemas que nos hacemos desde Occidente. Por ejemplo es interesante como el autor apunta a que el problema de África es Occidente, pero multiplicado por la propia idiosincrasia de África.
Un buen acierto la recomendación de Martita, y un placer leer un libro que durante ciertas noches ha compartido con ella cama. Jajajaja. :).
Gracias por dejarmelo, Marta.

Nota: 8,5 sobre 10

Laín Coubert

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