sábado, marzo 04, 2006

Lo importante está en el interior.... ¿no?


“Perdone caballero, pero en calzado deportivo no se puede entrar en este local.” Dos veces me repitieron esa fantástica frase ayer por la noche. Yo que quería colaborar en la subida empresarial de los jóvenes empresarios de la movida nocturna sevillana y no me dejaron. Me tuve que venir entonces a consumir al Guaraná. Po vale. Antes estuvimos en un par de sitios, incluida La Carbonería. Siempre que entramos allí salgo con la misma pregunta en la cabeza. ¿Tendrán las guiris el mismo ADN que nosotros? La que se me sentó ayer al lado era la típica imagen de lo que se supone que los fedayines esperan encontrarse en el paraíso. Describirla es inabarcable para mi lenguaje. Pero lo mejor es que hasta hablaba. Un español muy raro, castellano con acento de Newcastle por lo menos. Pero hablaba, que es lo importante.
Esta mañana volví a ver a una chica preciosa. Esta vez estaba en la convención esa que hace el PP S.A. en Madrid. Estaba Aznar diciendo que él nunca había negociado con ETA (cosa que es cierta, puesto que él sólo negoció con el Movimiento Nacional de Liberación Vasco, según sus propias palabras). Seguramente hablaría con ellos en euskera porque lo hablará en la intimidad tal como hablaba el catalán, el texano o el alemán (estos dos últimos hasta en público). La chica en cuestión, que me desvío, era un portento de la naturaleza. Me explico. Aznar allí soltando su cuento y la tía sonriendo. Y pasaban los minutos y la sonrisa seguía. ¿Anuncio de una compañía pija de ortodoncias? Pues puede ser. No lo sé. ¿O a lo mejor es que le contaron el chiste ese de en que se parece Zaplana a El Padrino? La verdad es que la sonrisa de la chica era increíble. Y pasó Fraga, Gallardón, Acebes el descorbatado….y la sonrisa seguía. La sonrisa y el polo Lacoste, todo sea dicho.
Pero luego me pongo a pensar….Tanto fijarme en lo físico. ¿Lo importante no está en el interior? Pues claro que sí. Lo importante es ser buena gente, tener un gran corazón y buenos sentimientos. Así que la semana que viene iré de nuevo a la Carbonería y le preguntaré a la guiri esa de ojos azules que si es buena gente. Todo puede ser posible. Peores cosas se han visto en la noche sevillana. (Ah!, e iré en zapatos y no en deportes)

Saludos a lo Bush al bajarse del avión en Pakistán.

Laín Coubert