domingo, abril 05, 2009

Esas cosas raras llamadas libros (y XXXIV)

Éste es un magnífico ejemplo de esos libros que se leen porque algo accesorio, como puede ser el diseño de la portada, llame tu atención en la biblioteca o en la librería. La Décima Sinfonía es un libro correcto, con una prosa simple y sin estridencias. Un libro que te introduce en la historia de la búsqueda del manuscrito que recoge la décima sinfonía de Beethoven, uno de los mayores misterios de la música, porque se desconoce si realmente el compositor llegó o no a trabajar en ella.
Una historia que introduce multitud de detalles sobre música y sobre los personajes históricos que aparecen en el libro, sobre la Revolución Francesa y sobre grupos masones.
Daniel Paniagua, musicólogo experto en Beethoven, se involucra en la búsqueda del documento, tras el horrendo asesinato de un director de orquesta. Descifrar una clave que auna letras, números y notas musicales se convertirá en la meta de una carrera contrarreloj.

Escrita por un musicólogo español escudado tras el seudónimo de Joseph Gelinek, pianista humillado por Beethoven en un duelo musical, es una novela superventas que cumple para tenerte pegado a sus páginas, sobre todo cuando se llega al final, un tanto, eso sí, rebuscado, tal como, al fin y al cabo, todo el libro.

Publicado por Plaza y Janés

Laín Coubert

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