Palabras. Se pueden estirar y contraer. Girar y girar. Cambiar y jugar con ellas.
Sin embargo a veces comprobamos como no son suficientes en esta vida para representar algunos sentimientos.
Lo sentimos Manu.
Te queremos.
Hassam, Willy y Elena.
Cuando escucho la vieja voz de mi sangre que canta y llora recordando pasados siglos de horror, siento a Dios que perfuma mi alma y en el mundo voy sembrando rosas en vez de dolor.
5 comentarios:
Lo siento, Manu.
Un beso.
Me he enterado ahora, Manu.
jartzen dut
Musu bat
Un abrazo amigo.
En estos días estarás superliao, pero te veré cuando os acerquéis por mi barrio.
Un abrazo.
Cuando escucho la vieja voz de mi sangre
que canta y llora recordando
pasados siglos de horror,
siento a Dios que perfuma mi alma
y en el mundo voy sembrando
rosas en vez de dolor.
Saludos socialistas.
Enciendo el ordenador para remitir el material del curso, y encuentro esto.
Es cierto, muy cierto, que las palabras se quedan cortas.
Gracias, amigos/as.
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